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22 de Agosto: Acto Homenaje a los Luchadores por el Socialismo

El 20 de agosto de 1977 desaparecen dos militantes de la organización que en los años 70 sentó las bases de nuestra actual concepción, la Liga Comunista, conjunción de parte de la Fraccción Roja del PRT y el Grupo Espartaco, que con el aporte político de cuadros de otras, como Patria Socialista y el Grupo Obrero Revolucionario (GOR), desarrolló su actividad entre los años 74 y 75, hasta que una división en su seno originó la Fracción Combate, a la cual los compañeros Nicolás, Pedro y Mariano brindaron su juvenil experiencia, tan intensa que es posible asimilarla a la de veteranos en las tareas revolucionarias de todo orden.

Les rendimos en estas cortas líneas el homenaje de página que tantas veces hemos realizado en nuestro corazón y en nuestra tarea de estos años, haciendo pública nuestra reivindicación con la discreción a la que siempre nos ha obligado su ejemplar humildad.

Ellos, Luis Alberto Verdú, (Nicolás); Angel Eduardo Fiocchi, (El Flaco Pedro); y Miguel Angel Esborraz, (El Cuervo Mariano); desaparecidos los dos primeros en Santa Fe el 20 de agosto de 1977 y en Córdoba, apenas un año antes, el 24 de julio de 1976, el tercero. Ocupan por estos días gran parte de nuestra memoria, encendiendo con la llama del ejemplo el odio que mantenemos intacto al enemigo de clase.

Sólo de Nicolás teníamos una foto, ahora tenemos las otras, ojalá podamos tener un día para mostrar al pueblo la imagen de todos los que lucharon sin cuartel, más importante de grabar seguramente que las banales imágenes que el sistema convierte en íconos. Día que llegará sin duda alguna.

De cómo fueron, sus compañeros de lucha podemos decir, honestos, firmes, combatientes. Y consignar una semblanza que de Nicolás hiciera alguien en una de esas buenas páginas que existen sobre los compañeros desaparecidos.

Debemos pensar que cuando esta persona -a la cual desafortunadamente no conocemos y ese manantial de memoria, sentimiento y buena fe que la distinguen es tan limpio que supera lo más negro y atrae por su honestidad- conoció a Nicolás en esa escuela, él tenía 21 años. De esa veteranía en el compromiso con la Revolución hablamos más arriba. Creemos que podemos extender a Pedro y El Cuervo esta semblanza, y aseguramos que no estamos malversando ni abusando de la misma, ni extendiendo injustificadamente la intención de un autor que nos despierta el más vivo respeto y al cual no le fallaríamos por nada del mundo. Los compañeros nos lo reprocharían.

He aquí el texto:

Tuve la oportunidad de conocerlo a Luis en 1973, siendo el celador de nuestro curso en la escuela industrial, recuerdo especialmente sus charlas en los recreos, donde nos planteaba a nosotros jóvenes de 15 años sus convicciones. Nosotros en aquella época creíamos ser peronistas, y él confrontaba con nosotros sus ideas, formaba parte de un grupo en la escuela llamado “espartaco”, nos hablaba de la revolución permanente y eso nunca lo olvidaré. Es más había días que no salimos del aula porque en los recreos, nos quedábamos discutiendo de política y si se interrumpía la discusión la seguíamos en el próximo recreo.
Era una persona excelente y lo apreciaba mucho.

Recuerdo que un día leí un recordatorio en el diario de su desaparición y creo que también vi en tv un documental acerca de ese hecho, y me conmovió muchísimo, después de la escuela no lo volví a ver.

Soy profesional y padre de seis hijos y siempre que hablamos del tema le menciono la memoria de aquel celador, que nos daba clases de socialismo en los recreos. No lo conocí más que en aquellas circunstancias, pero por lo poco que lo conocí, me pone muy triste su destino, porque una persona como él se merecía vivir, y tal vez encontrarse con sus alumnos y seguir discutiendo de política en los recreos de la vida.

He conocido de cerca a pocas personas a los que golpeó la represión, como a Luis, y tengo mucha bronca por lo que le pasó.

Si a algún familiar le llega esto sepan que los que lo conocimos en aquella época, guardamos los mejores recuerdos, aunque no hayamos podido hacer nada para torcer su destino.

Pierda cuidado el autor, sin intención de consuelo, sin el más mínimo ánimo de dispensar a los genocidas, ese destino es el noble corazón de personas como él y la conciencia de futuro de muchos que seguimos compartiendo esas clases de socialismo, negación de la barbarie que hoy campea. En esto continúan Nicolás, Pedro y Mariano.

LUIS ALBERTO VERDÚ ESPINOSA
Desaparecido el 20/8/77 en Santa Fe
ANGEL EDUARDO FIOCCHI ARCE,
Desaparecido el 20/8/77 en Santa Fe
MIGUEL ANGEL ESBORRAZ,
Desaparecido el 24/7/76 en Córdoba

Alzamos el puño y los saludamos con aquella consigna, la última que pintaron desde la clandestinidad, y que sintetizaba el clima de definición y combate de los años 70 y de los compañeros:

 

REVOLUCIÓN SOCIALISTA O MUERTE

HASTA LA VICTORIA

 

 

1976-24 de Marzo-2024

AUNQUE 30.000 VECES NOS MATEN,30.000 VECES VOLVEREMOS.

 

El 24 de Marzo de 1976 significó para el pueblo y los trabajadores de nuestro país la concreción de los planes del imperialismo yanqui que había sembrado en los países de América Latina su reguero de dictaduras contrarrevolucionarias , para ahogar en la sangre y el exterminio el ascenso de la lucha revolucionaria por el Socialismo. Se suele decir que ese fue el período del terrorismo de Estado y sin dudas ese período estuvo signado por el terror , pero no fue una excepción en la regla del comportamiento del estado burgués. Allá por el 2004 en el Encuentro de Derechos Humanos que se realizó en Paraná, asumimos claramente que el Estado capitalista es un Estado Terrorista.

Terrorista es el Estado capitalista, sin importar la forma de gobierno que asuma, de ahí se desprenden la desaparición de Jorge Julio López, las represiones contra las luchas del pueblo y los trabajadores durante los años 90, los asesinatos en las jornadas del 89 y 2001, el asesinato de Kosteki y Santillán, el de Mariano Ferreyra, Silvia Suppo y el asesinato televisado de Facundo Molares, sólo por nombrar algunos de los más relevantes en el período que le siguió a la dictadura.

A 48 años del inicio de la dictadura contrarrevolucionaria y genocida, a 40 años de la implantación de la Democracia Burguesa, decimos que ese Estado que hoy es atendido por sus propios dueños, requiere por pedido explícito del imperialismo yanqui asumir su rol represivo en toda su dimensión.

Que nadie se engañe, el gobierno de Milei, Villarruel, Bulrrich, Petri, el PRO, UCR , PJ y los gobernadores han declarado la guerra a los trabajadores y el pueblo. Semejante y brutal plan de ajuste, semejante nivel de sumisión al Imperialismo, solo se puede sostener con un brutal plan represivo, que requiere del Estado burgués el cumplimiento de su única y más importante función en el capitalismo, tal como lo define la ciencia proletaria “destacamento especial de elementos armados y sus aditamentos”. Asumir una forma de gobierno que expresa el nivel de sumisión de los burgueses nativos, la forma de gobierno de una colonia donde la única ley que vale es la del amo yanqui. Esa es la tarea encomendada a este gobierno nacional y los gobernadores, garantizar la exclusividad para el saqueo, la rapiña y la extranjerización de nuestro territorio y riquezas naturales. El reparto del mundo que hoy está signado por una guerra de carácter mundial requiere del alineamiento incondicional del cipayaje argentino, redefinir cuál va a ser el lugar que ocupe nuestro país en la división internacional del trabajo que es la primarización de la economía. Para que los gringos crezcan y mantener a los zánganos de sus países requieren la dominación directa sobre su patio trasero. El plan de gobierno de Milei y compañía es el plan de pago de la deuda externa con más endeudamiento, es el ajuste brutal sobre los trabajadores, los jubilados y el pueblo. Todo para el amo yanqui, para el Fondo Monetario, para los buitres. Para la clase trabajadora más hambre, más miseria y más milicos.40 años de democracia burguesa allanaron el camino, gobierno tras gobierno, para imponer mediante las urnas la más sofisticada forma de dominación. Por ello el 24 de Marzo de 1976 la dictadura contrarrevolucionaria vino a exterminar a 30000 compañeros que eran la expresión de la lucha por el Socialismo. Vino a desaparecer, torturar, asesinar y encarcelar a una vanguardia organizada que se proponía enfrentar al sistema capitalista, que atacaba a los intereses de la burguesía, que se enfrentó a las patronales y a los gobiernos, que utilizó métodos de lucha que amenazaban ciertamente los privilegios de la parásita clase burguesa. Infinidades de enfrentamientos, asaltos, huelgas, tomas de fábricas, boicots, piquetes, rebeliones populares, movilizaciones, signaron el período más alto de combatividad y lucha de los trabajadores y el pueblo en nuestro país. Para ello los revolucionarios se constituyeron y asumieron su rol de vanguardia organizada. Pero la dictadura contrarrevolucionaria dejó trunco el objetivo estratégico de la lucha obrera y popular y una vez cumplida su misión, abrió el camino para la apertura de un período democrático burgués que lleva ya 40 años. Una democracia burguesa que lejos de solucionar el hambre y la pobreza como prometen los candidatos de turno en tiempos de elecciones, los ha extendido y profundizado. Una democracia burguesa que nos ha educado en la docilidad de la institucionalidad y la legalidad burguesa. Una impresionante maquinaria de dominación se erige sobre el pueblo y los trabajadores, a través de la penetración ideológica que nos impone ideas, pensamientos y formas de vida ajenas a nuestra clase.40 años de democracia burguesa instalaron una «normalidad aparente», de una vida en «sociedad», donde parecían ausentes las confrontaciones de una sociedad dividida en clases sociales y por lo tanto, se encubría la lucha de clases. Pero se han acabado los períodos “normales» y a situaciones extraordinarias hay que responder con acciones extraordinarias, o mejor dicho retomar la senda legada por nuestros 30000.Hoy día el plan de guerra para entregar todo al Imperio está en marcha; un plan de guerra que requiere de la militarización del territorio más estratégico desde el punto de vista geopolítico del país, como es Rosario y el cordón industrial, para garantizar corredores seguros para el saqueo; que requiere de la dolarización para el blanqueo de uno de los negocios capitalistas más rentable hoy, el narcotráfico; que requiere de puertos seguros para los gringos saqueadores; que ya no necesita de industrias del acero ni de la obra pública, ni de la producción de bienes de sustitución de importaciones. Así es como se hace pelota a un país “capitalista dependiente” y se lo vuelve colonia yanqui. En la Colonia no necesitan sostener la parafernalia que implica Salud y Educación y todas las conquistas de relativa seguridad social para el pueblo, por eso los están destruyendo. Todo lo público será privado y una muy pequeña minoría podrá gozar de ella. Podemos ver claramente el verdadero rostro del capitalismo, no hay margen de capitalismo más humano. Ahora queda claro que han fracasado los métodos de enfrentar al enemigo de clase durante estos 40 años, no es ni será con diputados o candidatos de izquierda o progresistas, ni con inmensas movilizaciones pacíficas. Es hora de asumir nuestra tarea como clase, asumir que aquello por lo que lucharon y entregaron sus vidas los 30000 es el único norte posible. Porque mientras las patronales, los Milei, Macri, Bulrrich, Villarruel, los gordos capitalistas, los burócratas, los gringos, viven rodeados de obscenas riquezas hechas con nuestro sudor y sangre, al pueblo y los trabajadores nos condenan al HAMBRE, LA PESTE Y LOS MILICOS.

Compañeros, al enemigo de clase se lo enfrenta, es necesario coordinar las luchas, plantarnos frente a las patronales y los explotadores de clase y prepararnos conscientemente para extender y profundizar la resistencia, hacerla ofensiva y a la ofensiva, victoria.

 

 

 

MILEI BASURA VOS SOS LA DICTADURA.

Abajo el gobierno de Milei.

Fuera yanquis de Argentina.

Guerra al Imperialismo

“No hay más cambios que hacer o Revolución Socialista O caricatura de Revolución.”   Che.

 

1976 – 24 de Marzo – 2024

 

2019 – 26 de noviembre – 2023

La forma revolucionaria exige que los miembros de un partido sean ELEMENTOS CONSCIENTES, POLÍTICAMENTE FIRMES, TEÓRICAMENTE FORMADOS, MILITARMENTE APTOS E IDEÓLOGICAMENTE DEFINIDOS CON ABSOLUTA SEGURIDAD. La tarea de plantear la idea de que LA DESTRUCCIÓN DEL ESTADO BURGUÉS EN FORMA VIOLENTA ES LA BASE ESENCIAL PARA EL LANZAMIENTO DE LA CONSTRUCCIÓN DE UNA SOCIEDAD MÁS JUSTA, no puede ser llevada a cabo sin la existencia de CUADROS MILITANTES SÓLIDAMENTE VINCULADOS, RESPONSABLES POR SÍ Y POR LOS DEMÁS, DISCIPLINADOS Y ABIERTOS A LAS IDEAS A LA VEZ, PERO POR SOBRE TODO, PROFESIONALES DISPUESTOS A SUPRIMIR CUALQUIER OBSTÁCULO QUE SE INTERPONGA ENTRE SU SER SOCIAL EN EL MARCO BURGUÉS Y SU CONDICIÓN DE REVOLUCIONARIO».



EDGARDO GIURA

Compañero Presente Ahora y Siempre!!!

VENCEREMOS!!!

 

 

 

Nuestro país al igual que el resto de los países de América Latina se encuentra totalmente condicionado por la situación internacional. Una crisis capitalista fenomenal arrasa hasta el último rincón del planeta.

Las burguesías imperialistas solo pueden obrar de una única manera, concentrar aún más el capital para garantizar mayor margen de ganancias.  Esta crisis de sobreproducción, este  proceso de destrucción de fuerzas productivas se traduce en disputas interimperialistas e interburguesas y conflictos por ganar o controlar la mayor cantidad de territorios posibles, ya sea para obtener materias primas y mano de obra barata, como para ampliar mercados .

Las guerras imperialistas impulsan el enfrentamiento entre naciones o grupos de naciones y siempre su trasfondo determinante es por causas económicas.

Desde que el capitalismo asume su  fase superior, EL IMPERIALISMO, los países de América Latina, Asia y África han sido sometidos a distintas formas de dominación y son permanentemente expoliados.

Argentina no es ajena a la expoliación,  la opresión y el saqueo imperialista.

De Argentina, el Imperialismo yanqui requiere una vuelta a la primarización de la economía, el pago permanente de la deuda externa, una reforma laboral que extermine todas las conquistas obreras, la eliminación por completo de la estabilidad laboral y la pulverización de los salarios, la destrucción por completo de todo vestigio de educación y salud públicas; para cumplir con ello ha tomado las riendas de la semicolonia.

El próximo gobierno argentino, sin importar quién gane,  lleva detrás la bandera yanqui. Allí está el embajador Stanley, la jefa del comando sur Laura Richardson, los veedores del FMI, los muchachos de la DEA y la CIA. Y las bases militares en nuestro territorio.

La exigencia número uno del imperialismo yanqui es el alineamiento incondicional a sus políticas y decisiones, sean estas de orden interno u externo.

Massa o Milei.
Democracia o Dictadura.
Entre Cipayos no hay cornadas.

Que “no  son lo mismo”, es una verdad de perogrullo. Cada uno representa a un sector u otro de las clases dominantes de nuestro país y de los intereses del Imperialismo en el mismo. Pero plantearle al pueblo la elección entre Massa o Milei como la contradicción entre Democracia o Dictadura, no explica en absoluto nada. Democracia? Qué democracia? La única democracia que hoy rige es la democracia burguesa; esa que Lenin definía claramente….»Tomad las leyes constitucionales de los Estados contemporáneos, tomad la manera como son regidos, la libertad de reunión o de imprenta, la «igualdad de los ciudadanos ante la ley», y veréis a cada paso la hipocresía de la democracia burguesa que tan bien conoce todo obrero honrado y consciente. No hay Estado, incluso el más democrático, cuya Constitución no ofrezca algún escape o reserva que permita a la burguesía lanzar las tropas contra los obreros, declarar el estado de guerra, etc. «en caso de alteración del orden» —en realidad, en caso de que la clase explotada «altere» su situación de esclava e intente hacer algo que no sea propio de esclavos—.”

Destacamos esta última parte de semejante concepto de la democracia burguesa porque el fantasma del fascismo y la dictadura se ciernen permanentemente sobre la clase obrera y el pueblo.

Milei y Villarruel lo plantean desembozadamente y expresan sin tapujos su admiración a los milicos genocidas; solamente el balcón de la democracia burguesa puede permitir que estos reverendos fachos hijos de puta se expresen, ellos sí, libremente.


Por otra parte, Massa no niega en ningún momento su deseo de que esas mismas fuerzas genocidas irrumpan en el escenario de la política argentina. Además es su propio gobierno el que se encarga de militarizar los barrios populares, sitiar las ciudades y rodear los centros de producción industriales. Son las mismas fuerzas y partidos de esta «democracia» las que aplaudieron , calladitos la boca,  la represión al pueblo jujeño; las mismas fuerzas y partidos que aplaudieron, también calladitos la boca, el asesinato televisado de nuestro compañero Facundo Molares.

Han llegado a tal punto de decadencia política, que la propia burguesía recurre a plantear en la campaña una antinomia absurda y engañosa que empujan a través del miedo implantado al pueblo y los trabajadores, a elegir entre «Democracia» o «Dictadura», como si solo millones de votos pudieran poner freno a la avanzada reaccionaria de la ultraderecha y los apologistas de la  dictadura genocida.

Entonces, hay que hablar francamente y quitarnos el velo de los ojos : La sociedad no se divide entre votantes de Massa o Milei. Ni entre Democracia o Dictadura. La sociedad se divide entre explotadores y explotados.  Y tanto Massa como Milei, están del lado de los explotadores, van juntos de la mano con el  partido militar, los patrones y los burócratas sindicales.

Lo que está en disputa es en manos de quién va a quedar el gobierno del estado burgués,  y el Estado Burgués es por definición …»el destacamento especial de hombres armados, que tienen a su disposición cárceles y otros elementos.»( F. Engels)

El estado capitalista ejerce la dominación de clase, puede o no, según la correlación de fuerzas, otorgar ciertas concesiones o adquirir a través de sus gobiernos, formas más o menos populistas o «benefactoras», pero su carácter de clase, su rasgo esencial de destacamento de hombres armados, subyace y es permanente.

Durante este período de 40 años de democracia burguesa, respetando la alternancia de gobiernos de distintos signos políticos, han acumulado medios represivos y jurídicos para cumplir con el principal mandamiento del Imperio, el control de cualquier atisbo de organización obrera, popular y revolucionaria, mediante lo que ellos llaman la guerra de baja intensidad o de contrainsurgencia. De ahí la ley antiterrorista, los preparativos y entrenamientos permanentes a las fuerzas represivas por parte de los mismos sanguinarios que hoy masacran al pueblo palestino.

En esta falsa  disyuntiva impuesta al pueblo y los trabajadores entre «Massa o Milei», «Democracia o Dictadura», se oculta la verdadera y única contradicción fundamental, entre  explotadores y explotados. Se niega la lucha de clases cubriéndola bajo el manto absurdo de los «intereses generales de la sociedad».

Para el pueblo y los trabajadores no hay opción,  gane quien gane, avanzará el ajuste y la represión. La derecha ya está ensoberbecida, inflada, envalentonada.

No se la puede enfrentar con votos, se la enfrenta con lucha y organización. Hay que enfrentarla en las calles con el único lenguaje que pueden entender, el de la fuerza proletaria organizada, decidida y valiente.

El plan ya está en marcha y la democracia burguesa tiene lugar para todas la voces , incluso para el fascismo con quien debaten públicamente, pero quien no tiene nunca voz en esta democracia es el pueblo y los trabajadores.

Para que se escuche nuestra voz es necesario enfrentar al gobierno, venga quien venga, gane quien gane.

Porque la única salida es la revolución Socialista. La única salida y la única democracia verdadera es la que se construye sobre la bases de la destrucción del Estado Burgués: la dictadura del proletariado.

 

18/11/2023

 

 

Gloria a los Héroes de Trelew !

Compartimos nuestra intervención en el acto Homenaje a los luchadores por el Socialismo, realizado ayer 22 de agosto en la ciudad de Rosario.

Asistimos a un momento de la historia del capitalismo mundial en franca descomposición.

La situación mundial se encuentra signada por un período de agotamiento donde reina la rapiña, el saqueo.  América y África constituyen los territorios en disputa sobre los cuales el imperialismo ha posado sus garras asesinas y de donde obtienen las materias primas, mano de obra barata y el condicionamiento, vía deuda externa que garantizan la sobrevivencia en sus naciones. Mecanismos de explotación y expoliación que no resultan nuevos. Frente a la crisis descomunal, la guerra se constituye como la herramienta central para ejercer el control sobre el globo. El avance represivo y militar en todos los terrenos y el ensayo de control a nivel planetario durante la pandemia responden a la profundización de las contradicciones de clase que convulsionan aquí y allá,  al pueblo y los trabajadores del mundo. Millones y millones no obtendrán más respuesta que la del palo represivo.  Millones ya mueren hambrientos, abandonados, completamente desposeídos, mueren millones de niños que jamás asomarán al futuro.

La vida en este sistema al cual nos muestran como el único posible resulta invivible para las más amplias mayorías, otra parte del pueblo y los trabajadores transitará por ella sin más opción que la de ofrendar su fuerza de trabajo a cambio de salarios y condiciones de trabajo paupérrimas.

Simplemente nacer y morir pasando por la vida para que sólo un puñado de poderosos conserven sus privilegios y nos zampen cachetada tras cachetada sus vidas suntuosas.

Nuestro país no es la excepción en esta situación,  Argentina ha sido un país capitalista dependiente. Una semicolonia de la que EEUU se ha valido permanentemente según sus necesidades imperiales.

En la actualidad se ha incrementado la dependencia política y económica de un modo fenomenal. Esa dependencia se traduce en planes concretos de hambre y miseria para la gran mayoría de nuestro pueblo, y  que son ejecutados por los gobiernos cipayos bajo la mirada atenta del amo yanqui, corren todos presurosamente a reunirse con el FMI, compiten a cuál más cumplidor con el imperio, a cuál más represor, más bestial, más asesino, más criminal. Con mano dura reprimen y someten al pueblo y los trabajadores, con mano blanda consienten a las patronales explotadoras, los ricachones, a los verdugos, a los terratenientes.

Y mientras un puñado de opulentos goza de privilegios, las grandes mayorías van perdiendo sus derechos conquistados, sus pequeños logros obtenidos. Se acabó el trabajo como lo conocíamos nos dicen y nos despiden, nos precarizan, nos condenan a la vida miserable del mendigo que vive por un bolsón de comida y un plan social. Y si no nos matan de hambre nos matan de bala, asesinando a nuestros pibes en los barrios con el gatillo fácil.

Han destruido la salud, la educación, no hay un solo pedazo de tierra o una vivienda para habitar. La vida en este sistema para que pueda ser vivida dignamente es muy cara y solo para algunos pocos. La vida para una  inmensa mayoría no vale nada, absolutamente nada.


Los combatientes revolucionarios

Homenajear a los compañeros que idearon y llevaron adelante la fuga del penal de Rawson, frente a la mayor de las adversidades, encarcelados por la dictadura de Lanusse, en un penal de máxima seguridad,  aislados a miles de kilómetros de los grandes centros urbanos del país,  es homenajear a quienes «fueron capaces de derribar los muros de la cárcel» para reintegrarse enteramente a la lucha revolucionaria.

«Fueron capaces de enfrentar al sistema capitalista», el mismo sistema que hoy impera  tal como lo definimos más arriba. Capaces de enfrentarlo en todos los terrenos de la lucha revolucionaria, convencidos de que esa lucha es una guerra, guerra de clases, guerra larga con avances y retrocesos, lucha en la que no cejaron ni un minuto de sus vidas. Y por la cuál fueron capaces no sólo de morir por ella, sino también de asaltar los nidos de ametralladoras del enemigo.

En estas circunstancias que nos toca vivir, en este momento histórico que nos toca atravesar, claramente más de uno se ha preguntado cómo es que no haya alguien que haga justicia frente a tanto atropello, cómo es que nadie le ponga límites a tanta impunidad imperante. Y es ahí donde vemos más concretamente la ausencia de esos compañeros, de esas organizaciones, de esa decisión. Porque es esa decisión la que está faltando para empezar a poner límite a tanto atropello. A la opulencia de los ricos, a la barbarie, al embrutecimiento, a la bestialidad, al desprecio que las clases dominantes ejercen permanentemente sobre nuestro pueblo. No les salía gratis meterse con un revolucionario,  no era gratis ofender al pueblo, apalearlo, someterlo, explotarlo. No salía gratis ni un despido. Los límites se imponían con la fuerza de una vanguardia revolucionaria.

Muchas veces se habla banalmente de la Unidad, para nosotros la unidad es aquella que forjaron los compañeros en la cárcel de Rawson. Una unidad con principios claros, con objetivos comunes contra un enemigo claramente definido. Una unidad que no aceptaba alianzas con los sectores conciliadores.

Homenajear a los combatientes revolucionarios cada 22 de agosto es un ejercicio de memoria militante, de compromiso revolucionario, es un juramento irrompible que nos cabe a las organizaciones y destacamentos que llevamos en alto las banderas rojas y el puño izquierdo del Socialismo.

No queremos en este día tan importante, dejar de mencionar a nuestro compañero Tito Mezzies, ejemplo de militante comunista, quien fuera secuestrado por los milicos genocidas en 1977,  de las puertas de la copistería La Manija, aquí enfrente.

Y un párrafo más para el compañero Facundo Molares que fue asesinado hace unos días atrás por las botas criminales del Estado burgués. Facundo Molares hoy ingresa a ese pabellón honorífico junto a los compañeros de Trelew. Lo  afirmamos desde el primer momento, a Facundo Molares hace tiempo que el imperialismo lo quería muerto. Lo intentó un sinfín de veces , en Colombia, en Bolivia, aquí mismo. Y nos enrrostró su asesinato a sangre fria en la cara, frente a todo el pueblo. Imperdonable. Facundo Molares es un hijo del pueblo, es nuestro hermano. Es un ejemplo.

Juramentamos por Facundo, por Tito, por nuestro héroes de Trelew, hacer justicia por nuestros caídos!!!

La única justicia justa y posible, la justicia popular.

Por eso decimos que “fueron capaces de inspirarnos la conducta”. Que nadie se haga a la idea de que es posible terminar con la explotación, la opresión y el sometimiento por vías pacíficas como la electoral.
Sentenciaba el CHE:

«No podemos predecir el futuro, pero jamás debemos ceder a la tentación claudicante de ser los abanderados de un pueblo que anhela su libertad, pero reniega de la lucha que ésta conlleva y la espera como un mendrugo de victoria.»

Y esta es nuestra tarea, demostrar a los ojos del pueblo la vigencia de la lucha revolucionaria,  inspirar en él el deseo de la libertad, despertar su espíritu combativo. Exponer su verdadera esencia y razón de existir, la destrucción del Estado burgués y la imposición del socialismo. Única sociedad digna de ser vivida.

 

 

22/08/1972- Acto Homenaje a los Luchadores por el Socialismo – 22/08/2023

Nicolas, Pedro y Mariano, Presentes !

El 20 de agosto de 1977 desaparecen dos militantes de la organización que en los años 70 sentó las bases de nuestra actual concepción, la Liga Comunista, conjunción de parte de la Fracción Roja del PRT y el Grupo Espartaco, que con el aporte político de cuadros de otras, como Patria Socialista y el Grupo Obrero Revolucionario (GOR), desarrolló su actividad entre los años 74 y 75, hasta que una división en su seno originó la Fracción Combate, a la cual los compañeros Nicolás, Pedro y Mariano brindaron su juvenil experiencia, tan intensa que es posible asimilarla a la de veteranos en las tareas revolucionarias de todo orden.

Les rendimos en estas cortas líneas el homenaje de página que tantas veces hemos realizado en nuestro corazón y en nuestra tarea de estos años, haciendo pública nuestra reivindicación con la discreción a la que siempre nos ha obligado su ejemplar humildad.

Ellos, Luis Alberto Verdú, Nicolás; Angel Eduardo Fiocchi, El Flaco Pedro; y Miguel Angel Esborraz, El Cuervo Mariano, desaparecidos los dos primeros en Santa Fe el 20 de agosto de 1977 y en Córdoba, apenas un año antes, el 24 de julio de 1976, el tercero. Ocupan por estos días gran parte de nuestra memoria, encendiendo con la llama del ejemplo el odio que mantenemos intacto al enemigo de clase.

Reivindicamos a nuestros compañeros caídos en el combate contra Estado Burgués y por el Socialismo.

Seguimos su ejemplo, continuamos su lucha. Hasta la victoria siempre!.

 

 

 

 

 

 

Aunque 30.000 veces nos maten, 30.000 veces volveremos


La lucha revolucionaria que se dio en nuestro país durante los años 60 y 70, representa para nuestra historia, la historia del pueblo y la clase obrera, el punto más alto y la expresión más clara de organización obrera y popular.

Esas organizaciones fueron la vanguardia que supo recoger en el pensamiento y la acción una definición estratégica para guiar a la clase obrera a pelear organizadamente por sus intereses históricos y bajo una única bandera: la de la lucha por el Socialismo.

Tan fuerte, tan importante, tan claro, tan contundente, fue el ejemplo de los combatientes revolucionarios que, en muy pocos años, lograron ganarse la voluntad y conciencia de amplios sectores del pueblo y los trabajadores. La simpatía que hacia las organizaciones revolucionarias se expresó por aquellos años, expone a los ojos de la historia, la importancia y dimensión de la posibilidad cierta de la revolución socialista en nuestro país.

Podríamos enumerar miles de acciones, movilizaciones, enfrentamientos, boicots, tomas de fábrica, expropiaciones, combates callejeros, aprovisionamientos, asaltos a cuarteles, fugas de las mazmorras del enemigo…, todas ellas, fruto de una voluntad inquebrantable.

Los compañeros lucharon por el poder, por eso tenían un partido de combate, clandestino con gran influencia de masas. Porque estaban en el camino correcto, en pleno combate a fuego cruzado, contra el Estado Burgués y su brazo armado, los grandes capitalistas y los jefes del Imperio decidieron el golpe contrarrevolucionario para exterminarlos y continuar luego con sus planes privatizadores, de empobrecimiento del pueblo y los trabajadores, tarea que le encargaron a la prostituta democracia nuevamente.

Se cumplen 47 años del golpe genocida, que entre 1976 y 1983, bajó los lineamientos del imperialismo yanqui para su patio trasero. Un plan continental que impuso el aniquilamiento de las fuerzas revolucionarias por intermedio de las fuerzas armadas, que impuso los planes y modelos económicos que hoy padecemos. Planes que contribuyeron al enriquecimiento escandaloso de los burgueses y oligarcas nacionales, que se constituyeron como socios menores del gran capital financiero transnacional. En 7 años allanó el camino para la instauración de la democracia burguesa.

Democracia que hoy esos mismos sectores festejan, y no es para menos, esa democracia la construyeron sobre la sangre de nuestros compañeros; los partidos de la burguesía y los sectores “progresistas” han desatado una inmensa campaña reivindicando los 40 años de democracia, de esta democracia de los ricos, de los poderosos, de las patronales. Una democracia que carga con el asesinato y la desaparición en enero del 89 de los compañeros de La Tablada y en el 2006 el secuestro y desaparición de Jorge Julio López (a los de La Tablada el “padre de la democracia”, el radical Raúl Alfonsín; a Julio López el gobierno “Nacional y Popular” de los Kirchner). Una democracia que garantiza la impunidad a los genocidas, que a pesar de la alternancia entre partidos burgueses mantiene intacto el sometimiento al imperialismo y cumplen sin chistar los planes económicos impuestos por el FMI y los organismos internacionales y paga religiosamente la Deuda Externa, sumiéndonos en la dependencia política y económica.

La democracia, la sacrosanta democracia, el mecanismo más sofisticado de dominación, la democracia burguesa, hoy cumple 40 años cometiendo crímenes a diario. Porque el Estado capitalista, sin importar la forma de gobierno que asuma, es un Estado terrorista.

TERRORISTA LA DICTADURA DE 1976. TERRORISTA LA DEMOCRACIA BURGUESA DE HOY.

Por lo tanto, el terrorismo de Estado no es más que un despliegue concreto de lo que esencialmente es el Estado Burgués. No una “perversión”, “exceso de función represiva”, “desviación”, “defectos”, “desconocimiento de principios democráticos”, “manifestación de tendencias autoritarias”, y demás afirmaciones que hacen los que sostienen que el Estado Burgués es un “Estado de derecho”, es decir, protector de las causas justas.

No hay que confundirse pensando que la represión está causada por el nivel de crisis capitalista y descomposición política del capitalismo. Las crisis lo que hacen es potenciar el grado de terrorismo ejercido. No es que el Estado se prive de ese recurso represivo ni por un instante, ni que desarme sus huestes. Cuando el Estado Burgués se ve privado del control ideológico, de márgenes económicos para hacer concesiones a los reclamos, por supuesto que acentúa su accionar represivo. Lo que la crisis y descomposición capitalista hacen en todo caso, es determinar el grado de intervención punitiva de las tropas sobre el pueblo que lucha y sobre la militancia que se organiza políticamente en su contra. Que quede claro: la represión no es un producto de la crisis, sino que es una característica esencial del estado terrorista burgués. Esta es una de las razones por la cual los gobiernos que se sucedieron en estos 40 años han coincidido en sostener, reforzar, mejorar, y equipar a las fuerzas represivas.

Entre tires y aflojes, con mayor o menor capacidad, hemos resistido durante este período. En algunos casos se ha logrado dar marcha atrás medidas de impunidad e injusticia. A diario se producen luchas y conflictos que se encuentran dispersos por todo el territorio, con reclamos de los más variados, fundamentalmente en el plano económico. Pero sin duda hemos sufrido un retroceso. Otro hubiese sido el cantar si esa vanguardia revolucionaria estuviera presente, y el enemigo de clase sabe perfectamente del estado de nuestras fuerzas. El enemigo de clase sabe que anida en el corazón del pueblo y los trabajadores la semilla de la rebelión. Pero conoce además nuestras limitaciones actuales.

Compañeros en esta ciudad de Rosario se produjeron hechos extraordinarios, como los rosariazos, los estallidos de 1989 o de diciembre del 2001. En esta ciudad donde se concentra gran parte de la riqueza de nuestro país, que se escapa por los puertos, donde hay millonarios negocios inmobiliarios, una monstruosa estructura se ha montado para expandir y cuidar los negocios capitalistas, incluido el negocio narco. Rosario y sus alrededores reúnen todas las condiciones de un centro geopolítico de importancia estratégica para el capitalismo. Y así es como lo cuidan, como lo que es, un centro geopolítico de importancia estratégica.

Están frente a una crisis sin igual, que se profundiza y se extiende y que acentúa el grado de descomposición en que se encuentran. Crisis que se traslada a todos los ámbitos de las organizaciones populares, que sufren a diario los trabajadores y el pueblo. Una situación que se vuelve insostenible, pero que sin embargo han podido hasta hoy sostener con relativa tranquilidad. Entendemos que este período nos debe llamar a las calles para evitar el avance de una política represiva que avanza en todas las líneas de intervención. Desde lo económico, empobreciendo a los trabajadores y el pueblo, privándonos de los más elementales derechos, alimentando la descomposición social, despojándonos de nuestra dignidad, sometiéndonos a una vida precarizada.

Pero para sostener tamaña expoliación, para garantizar el aumento de los ritmos de explotación, para seguir drenando la riqueza, no les alcanza con su sacrosanta institucionalidad. Recurren a la militarización de la ciudad. Hacen escuela con los yanquis que adoctrinan y preparan las tropas para enfrentar la más mínima expresión de resistencia. Mandan, además de toda la milicada y de los gendarmes que ya patrullan las calles, al mismísimo ejercito genocida. Ruido de botas en las calles rosarinas, anuncian el reforzamiento de la represión.

Es difícil entender que se haya llegado a estos niveles de empobrecimiento e injusticia social, de crecimiento exponencial del ejército de mano de obra desocupada, de precarización y flexibilización laboral o de rebaja permanente de los salarios, sin pensar en la aplicación efectiva y eficaz del mecanismo de dominación más sofisticado, la democracia burguesa.

Está más que suficientemente demostrado que en estos 40 años, las estrategias utilizadas por la izquierda electoralera se han convertido en uno más de los artilugios para mantener bajo el engaño al pueblo y los trabajadores. En estos 40 años han tergiversado y desviado nuestras luchas y nos han conducido al retroceso de la conciencia en la clase obrera. Han contribuido a este escenario en el que nos encontramos. Y si lo han podido hacer es precisamente porque no hay todavía una fuerza suficiente que le ponga coto, que tuerza el debate y la agenda política hacia las necesidades reales que se nos imponen. Del mismo modo con el enemigo de clase, el Estado Burgués. Hay que ponerle límite a tanta injusticia e impunidad. Pero no será con miles de votos en las urnas cada cierta cantidad de años. No será de la mano de sus instituciones, ni respetando sus leyes y reglas.

El límite solo puede venir de la mano de la organización revolucionaria, de la lucha decidida, causando el mayor daño al enemigo al menor costo posible, arriesgando, tal como lo hicieron los compañeros en los 60 y 70, en política, pensamiento y acción. El desafío está en constituir una vanguardia organizada capaz de encarnar en su estructura las aspiraciones e intereses más sentidos de los trabajadores y el pueblo, de influir tan profundamente como para comenzar a dar los pasos necesarios hacia el único cambio posible, el que garantice la verdadera democracia del pueblo y los trabajadores. Nuestro desafío es encarar la lucha por la Revolución y el Socialismo.

24 de Marzo 2023